¿Se pueden practicar todas las posturas sexuales durante el embarazo?, ¿Cuál es la mejor postura sexual cuando se está embarazada? Estas son algunas de las preguntas que más se hacen las embarazadas. En este sentido, las estadísticas señalan que el temor de hacer daño al feto, un abdomen cada vez más voluminoso y la sensación de tener un pequeño “intruso” como testigo de la propia intimidad hace que el 50 por ciento de las parejas que están esperando un bebé deje de tener relaciones sexuales conforme avanza el embarazo.

Sin embargo, mantener la armonía y la intimidad en la pareja durante el embarazo es bueno y útil, tanto desde un punto de vista físico como psicológico, y como para la mujer como para el hombre.

Cara a cara

En la orilla de la cama

Etapa ideal: Probablemente durante todo el embarazo, a menos que sientas mareos por estar echada boca arriba.

Ventajas: puedes cruzar las piernas por detrás de la espalda de tu pareja, controlando el ritmo de la penetración y acercando su cuerpo al tuyo. Además, sus manos quedarán libres para acariciar tus senos y estimular tu clítoris.

Desventajas: Podrías sentir mareos. Para aliviarlos, coloca almohadas bajo tu espalda y cabeza, irguiéndote un poco el cuerpo.

De lado, como “cucharas”

Etapa ideal: Cualquier etapa del embarazo, principalmente a partir de los seis meses, cuando es más difícil la posición cara a cara.

Si quieres más estabilidad, sitúa almohadas bajo tu abdomen y tus rodillas.

Ventajas: En esta posición, tanto tus manos como las de tu pareja quedan libres para masajes, caricias y la estimulación.

Desventajas: En esta postura la penetración es más superficial y, si te gusta más profunda, tal vez no sea la posición más excitante para ti.