En Estados Unidos un hombre llamado Thomas Cook cumplió su palabra y, tras ganar 22 millones de dólares en la lotería, dividió el gran premio con su mejor amigo.

Este par de buenos amigos eligió la opción del premio en efectivo que daba un total de 16.7 millones de dólares. Dando como resultado que cada uno se llevó a casa unos 5.7 millones de dólares después de descontar los impuestos.

Thomas Cook declaro muy feliz que al convertirse en el afortunado ganador de la lotería renunció a su empleo, y así poder emprender un viaje jutnos con su amigo Joseph Feeney y sus respectivas esposas.