Para la salsa de tomate:
Corta la berenjena en rodajas, rocía con la sal y deja reposando por dos horas para quitarle el sabor amargo. Enjuaga y seca las rodajas de berenjenas. Fríe en una sartén con una cucharada de aceite, haz lo mismo con las calabacitas rebanadas.
Para la salsa de tomate:
Calienta el aceite en una sartén y fríe el ajo picado, añade el jitomate y sazona con las hierbas italianas, la sal y la pimienta, deja cocinar hasta que obtengas una salsa, si es necesario puedes añadir un poco de agua.
Arma la lasaña usando la berenjena como si fuera pasta. Intercala la berenjena con las calabacitas, la salsa de tomate y el queso mozzarella, termina con el queso parmesano encima.
Hornea a 180°C durante 20 minutos, solo lo necesario para que se gratine el queso.
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